Selma Blair, actriz, escritora, productora y activista, sacudió una vez más al mundo del entretenimiento cuando, con total gracia enfrentó lo que sería su último baile en la competencia “Dancing With The Stars”, alegando que debía abandonarla ante el riesgo inminente de complicaciones por Esclerosis Múltiple, condición que padece desde el año 2018.
“Mi cuerpo definitivamente me está pasando factura. Es, por mucho, lo más seguro para mis huesos”
En la gala del pasado 17 de octubre, que se transmite en la plataforma streaming Disney+, Selma Blair le contó a su compañero en la pista Sasha Farber, la decisión de dejar la competencia no sin antes darlo todo en un último baile que conmovió a todos los presentes. Sobre su situación de salud indicó:
“Estuve en contacto con mis doctores durante todo el proceso. Tuve una resonancia magnética y los resultados arrojan que no puedo continuar con la competencia…Con los problemas crónicos se deben tener consideraciones especiales y mi cuerpo definitivamente está teniendo afectaciones. Es, por mucho, lo más seguro para mis huesos”.
El último baile de Selma Blair en “Dancing With The Stars”
“Con el diagnóstico comencé a vivir”
A raíz de su diagnóstico de Esclerosis Múltiple en el año 2018, Selma Blair aseguró que su vida empezó a cambiar para bien pues, finalmente encontró respuesta a tantos malestares que ella misma decía sentir desde hace mucho tiempo.
Con la enfermedad llegó el activismo y el rostro de Blair ya no sólo era asociado con tantas películas, era la cara más bonita de la Esclerosis Múltiple ante el mundo, una mujer cercana que, como todos, estaba simplemente tratando de sobrevivir de la mejor forma posible con una condición que en definitiva le cambia la vida a cualquiera.
Pero con “Dancing With The Stars”, y su renuncia, Selma Blair demostró que dejó el programa de televisión siendo una indiscutible ganadora, y es que ante una condición como esta, la única indicación correcta es escuchar a tu cuerpo, y eso precisamente fue lo que ella hizo.
Y salió ganando. Salió ganando porque venció miedos, porque calló lo que muy probable eran voces negativas a su alrededor y en ese camino, calló también a su enfermedad y lo hizo de la mejor forma posible, al ritmo de la música, con la frente en alto y en una pista de baile.